Los 5 terremotos más impactantes de la Historia (Parte 1)

Terremotos: sucesos inevitables de consecuencias mitigables.

Terremotos

Sentimos las vibraciones de los terremotos más pequeños con curiosidad, pero también con duda y un poco de temor. Las vibraciones siempre pueden ser un reto para las infraestructuras, que pueden verse dañadas al no estar adecuadamente preparadas.

Soluciones- Atiterremotos

Ahora bien, nada de eso te prepara para comprender lo que es un terremoto realmente importante. Salvo cataclismo cósmico, los terremotos son los fenómenos más poderosos que puede sufrir el ser humano. Afortunadamente, en muchas ocasiones los terremotos fuertes se saldan con, relativamente, pocas víctimas. Esto se debe a la adecuada construcción con medidas antisísmicas que mitigan sus efectos.

Cimientos edificios

Veamos una clasificación de los 5 terremotos más impactantes de la Historia.

Valdivia (Chile, 22 de mayo de 1960)

Ostenta el récord de ser el terremoto más fuerte jamás registrado, con 9,5 grados de magnitud. El seísmo se sintió en todo el cono sur americano, causó la erupción del volcán Puyehue y provocó un tsunami muy dañino que afectó a Nueva Zelanda, Filipinas, Japón, Hawái y la costa oeste de EE. UU. En Valdivia, dos millones de personas perdieron sus hogares y la cifra de muertos osciló entre 1655 y 2000.

Sumatra –Andamán (Indonesia, 26 de diciembre de 2004)

El terremoto que sacudió el océano Índico y también la sensibilidad de todo el planeta, que se vio desbordado por la catástrofe. Este terrible terremoto del 2004, de magnitud 9,3, tiene dos récords: el de mayor duración registrada (entre 8,3 y 10 minutos) y el de víctimas: 228.000 entre muertos y desaparecidos. Esta terrible cifra se explica por el devastador tsunami generado por el terremoto, que sacudió a 14 países costeros de la región, arrasando a su paso unas construcciones que no estaban preparadas para nada semejante.

Anchorage (Alaska, EE. UU., 28 de marzo de 1964)

El terremoto más poderoso registrado en la Historia de Norteamérica sacudió Alaska con una magnitud de 9,2. Se estima que 520.000 kilómetros cuadrados de corteza terrestre fueron deformados con un súbito levantamiento de hasta 11,5 m de altura (15 m en las islas Aleutianas). La sacudida fue tal que la estructura sólida del suelo se licuó por las vibraciones en Turnagain, convirtiendo a los acantilados de arcilla en una lengua fluida que arrastró viviendas. Afortunadamente, al ser una región aislada y muy poco poblada, solo se produjeron 128 muertes.

Kamchatka (Unión Soviética, 4 de noviembre de 1952)

A pesar de sus 9,0 grados de magnitud, el mismo aislamiento y la despoblación que favorecieron a Alaska protegieron a los habitantes de esta península rusa. Pero su efecto se dejó sentir en forma de maremotos que avanzaron por el Pacífico, alcanzando las islas Midway, Cocos y Hawai y a las costas de Alaska, California, Japón e incluso Nueva Zelanda y Chile. Los efectos de los maremotos fueron devastadores para las infraestructuras.

Honshu (Japón, 11 de marzo de 2011)

El seísmo más intenso de los registrados en Japón (9,0 grados) desplazó la isla unos 2 metros y alteró el eje del planeta unos 10 cm. Su epicentro se situó a 130 kilómetros de la costa de Honshu mar adentro y causó un devastador tsunami que arrasó la costa nipona y alcanzó Rusia, Taiwán, las islas Midway, Hawai y toda la costa occidental americana desde EE. UU. a Chile, con olas de hasta 4 metros. Hubo casi 16.000 muertos y pudo haber iniciado una serie de devastadores efectos en cadena de alcance mundial, pues produjo el accidente nuclear de Fukushima. En consecuencia, a nivel de política internacional se planteó cambiar los planteamientos sobre energía nuclear. Alemania, por ejemplo, cerró preventivamente 7 de sus 17 centrales nucleares e inició un plan de sustitución a medio plazo por otras fuentes de energía menos peligrosas.